El puente de piedra da acceso a la localidad de Valderrobres, provincia de Teruel, salvando el río Matarraña, entrando en ella por el Portal de San Roque.
La construcción del puente parece estar unida a la de sus murallas, con lo que las obras se iniciarían en torno a 1390, con la petición del arzobispo García Fernández de Heredia ante el rey Juan I el Cazador para la construcción de las murallas.
Mucho más difícil sería datar con seguridad la fecha de su conclusión; seguramente a principios del siglo XV y estando Valderrobres bajo la prelatura de Dalmau de Mur, responsable también de las plantas más altas del castillo.
El puente medieval, de cuatro ojos, es extremadamente sólido y provisto de tajamares en forma de cuña pensados para protegerlo de fuertes riadas y evitar la acumulación de troncos. En el siglo XVI se modifica su aspecto, al edificarse el Ayuntamiento sobre su último tramo.
El puente atraviesa la antigua puerta principal de acceso a la villa amurallada.
A finales del siglo XVI el portal fue consagrado a San Roque, protector ante las epidemias y patrón de la población.
Hoy en día es el mejor conservado de todo el conjunto.
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Fecha de última modificación: 13/08/2022
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